En el marco del Plan Piloto de Oralidad, se llevó a cabo una audiencia flexible y multipropósito que finalizó con la condena de un hombre de 48 años.

El juez de Orán Gustavo Ramiro Morizzio declaró procedente el acuerdo de juicio abreviado planteado por las partes y lo condenó a la pena de un año de prisión de ejecución condicional por ser autor de los delitos de amenazas con arma (dos hechos) y daños en concurso real.
Entre las reglas de conducta que le impuso se destacó la prohibición de cometer actos de violencia física, verbal o psicológica contra la víctima y su grupo familiar. Si el hombre no cumple con las medidas, la pena de prisión podría ser efectiva.
Los hechos investigados sucedieron en el barrio San Jorge de la localidad de Pichanal, el 16 de marzo del año pasado durante la madrugada.
La joven, sobrina del imputado, estaba durmiendo tranquilamente en su cama cuando escuchó ruidos en la casa de al lado. Intentó seguir durmiendo, pero los ruidos se fueron acercando hasta llegar al frente de su casa. Vio a su tío mientras tiraba algo y gritaba pidiendo que su padre saliera para pelear con él. En sus manos llevaba un machete.
El hermano del acusado, que también lo denunció, agregó como detalle que los problemas comenzaron un tiempo atrás, y que ya existían medidas de restricción. Explicó que la causa de todos los problemas era que su hermano estaba interesado en quedarse en la casa que perteneció a sus padres ya fallecidos, y que se encuentra ubicada en el domicilio colindante.
Añadió que el acusado es drogadicto y solía amenazar a su familia con machete u otros elementos peligrosos. Esa noche en particular, el acusado causó daños a una mesa en el patio de la casa y abolladuras a un automóvil.-