Con gran emoción y espíritu cultural, volvió el Patio Criollo en primavera, en el sector de la chimenea del Barrio El Milagro. En una jornada primaveral, la ocasión se convirtió, en una verdadera fiesta popular llena de color, tradición y alegría.

Emprendedores, artesanos y artistas fueron protagonistas de este encuentro, compartiendo con la comunidad su talento, creatividad y trabajo.
La gastronomía regional deleitó a los presentes con sabores únicos, mientras que el canto y la música encendieron el alma de la celebración. El baile tradicional puso a todos de pie, demostrando que la identidad cultural sigue viva en cada vecino.
La jornada fue un espacio de encuentro, unión y disfrute, donde los oranenses reafirmaron el valor de sus raíces y tradiciones.-